Los migrantes de la caravana de hondureños fueron frenados por elementos de la Guardia Nacional, a la altura del paso del coyote y el limón en la ribera del lado mexicano del río Suchiate, donde, al resistirse los migrantes, lanzaron piedras a los uniformados.

El saldo fue de al menos cinco elementos uniformados descalabrados, así como de varios migrantes lesionados. La situación se tornó tensa, pero luego volvió a la normalidad. Por la noche, la presencia de la Guardia Nacional fue reforzada y el cordón de seguridad entre el tramo del Paso del Coyote y el Limón continúa.

Los migrantes no se han resignado y pretenden insistir hoy martes en pasar a territorio mexicano. Mientras tanto, el puente fronterizo permanece cerrado a todo tipo de personas y vehículos, tanto del lado guatemalteco como mexicano, luego de la presencia de los integrantes de la caravana 2020.

Desde la madrugada de ayer lunes, los tres mil 500 migrantes decidieron caminar hacia el Puente Fronterizo Rodolfo Robles en Suchiate, Chiapas; ahí entregaron a las autoridades de Migración un documento dirigido al presidente Andrés Manuel López Obrador en el cual solicitaron libre tránsito por México, solicitud que fue rechazada.

La caravana pretendía ingresar a México por el puente Rodolfo Robles y con ello caminar por tierras mexicanas, situación que hasta el momento no se los permitieron. Durante la reyerta varios migrantes fueron asegurados y un grupo de por lo menos 200 personas logró huir hacia la carretera y a la altura de Frontera Hidalgo los interceptaron y encapsularon.

Personal del Instituto Nacional de Migración los obligó a subir a varios autobuses y posteriormente fueron trasladados a la Estación Migratoria Siglo XXI de la ciudad de Tapachula. La gran mayoría de los migrantes se quedó sobre la ribera del río, donde pasaron la noche.

Otra parte de los migrantes se trasladó a Tecún Umán donde les ofrecieron comida caliente en la casa del Migrante.

Dennis Omar Contreras, uno de los autoproclamados representantes de la Caravana, dio a conocer que derivado de la respuesta del gobierno mexicano, decidieron cruzar el río Suchiate: “Nosotros esperábamos el libre tránsito autorizado por el gobierno de México, pero fue rechazado y es por eso que decidimos cruzar por el río”, acotó.

Asimismo, decidieron rechazar la oferta laboral del gobierno mexicano y consideraron un engaño el hecho de solicitarles documentos para luego sólo buscar deportarlos a su país de origen sin darle una oportunidad de empleo. Pero además, no buscan quedarse en territorio mexicano, sino cruzar la frontera de México con estados Unidos.

Los migrantes se replegaron y buscaban evadir a los uniformados, sin embargo, sobre el canal que divide el mercado y el muro de contención al río Suchiate continuó la reyerta. Otros integrantes de la caravana se quedaron a la orilla del río sin continuar su camino.

Mientras tanto, se anunció la salida de otra caravana desde El Salvador, la cual pretende llegar a Tecún Umán en los próximos días.

Fuente: excelsior.