Tunecinos y dignatarios internacionales despidieron el sábado los restos del primer presidente democráticamente elegido del país, Beji Caid Essebsi, quien murió en funciones a los 92 años.

El ataúd con los restos mortales de Essebsi fue trasladado a las 10.45 (hora local) desde la residencia presidencial de Dar Essalem al Gran Salón del Palacio de Cartago por seis soldados de la Legión de Honor de los tres cuerpos militares que marcharon en una “atmósfera solemne”.

Gobernantes árabes y el presidente francés, Emmanuel Macron, asistieron a las ceremonias en la capital.

Oficiales del ejército cargaron el féretro, que estaba cubierto por la bandera tunecina.

Essebsi ganó la primera elección libre en Túnez luego de la insurrección de 2011 que llevó la democracia al país norafricano y provocó sublevaciones similares en todo el mundo árabe.

El titular del parlamento, Mohamed Ennaceur, asumió como presidente interino y convocó a elecciones para el 15 de septiembre.

Es una gran pérdida para la patria”, dijo el presidente interino sobre Essebsi, al que definió como ‘el artífice del consenso nacional’.

Túnez tiene problemas económicos y sufre esporádicamente ataques terroristas, pero es el único país que salió de la primavera árabe con una democracia funcional, y es relativamente abierto y estable en comparación con otros de la región.

Essebsi murió el pasado jueves a los 92 años de edad en el hospital militar de la capital tunecina tras sufrir su segunda crisis de salud en apenas un mes.

Era una figura clave de la política tunecina. Participó en los regímenes de Habib Burguiba y Zine el Abidine ben Alí pero resurgió tras la Revolución de los Jazmines para convertirse en el primer presidente democrático de Túnez.

Ennaceur, hasta ahora jefe del Parlamento, ha asumido la Presidencia de forma interina para un máximo de 90 días, mientras que las autoridades electorales han adelantado al 15 de septiembre los comicios presidenciales previstos inicialmente para el 17 de noviembre.

Fuente: Excelsior.