Donald Trump señaló este sábado, desde su cuenta de Twitter, que está considerando declarar a la organización de activistas opositores al fascismo, Antifa, como una “organización terrorista” en los Estados Unidos.

El mandatario norteamericano acusó al grupo radical de atacar manifestantes y periodistas conservadores en distintos eventos alrededor del país e incluso los comparó con los ‘Maras’.

Las declaraciones de Trump llegaron después de que los senadores republicanos Bill Cassidy y Ted Cruz propusieran una nueva ley para designar al grupo como una “organización terrorista doméstica”.

Pese a que Antifa se ha enfrentado en numerosas ocasiones a grupos supremacistas blancos y neonazis norteamericanos en verdaderas batallas campales, el gobierno de los Estados Unidos no ha tomado pasos para designar a estas agrupaciones de extrema derecha como organizaciones terroristas, como si pretenderían hacer con estos grupos radicales de izquierda.

Protestas y enfrentamientos de Antifa con grupos de corte fascista en eventos como el mitin neofascista celebrado en Charlottesville en el 2017, han arrojado saldos de muertos o heridos graves entre manifestantes progresistas, pero no se tienen reportes de personas muertas  a manos de este grupo antifascista que tiene presencia en los Estados Unidos y otros países del mundo.

Sin embargo, esto poco parece importar a las autoridades norteamericanas, comenzando por el presidente de los Estados Unidos, quien podría aprovechar la supuesta “amenaza” de este grupo radical para energizar a su base de cara a las próximas elecciones presidenciales.