El gobierno de Irán anuló sus compromisos nucleares.

Ayer, el país anunció que dio el quinto y último paso de reducción de sus acuerdos operativos fijados en el  Plan Integral de Acción Conjunta (PIAC) de 2015, que le limitaban el número de centrifugadoras usadas para el enriquecimiento de uranio.

Lo anterior significa que el programa nuclear iraní ya no enfrenta ninguna restricción operacional.

Se suspendieron los límites de enriquecimiento de uranio y su cantidad, así como las tareas de investigación y desarrollo.

A partir de ahora, el programa nuclear de Irán será desarrollado sólo con base en sus necesidades técnicas.

Esto ocurrió tres días después de que Estados Unidos ejecutó al general iraní
Qasem Soleimani, operador militar de Oriente Medio.

Pese al anuncio de ayer, Teherán seguirá la cooperación con el Órgano Internacional de Energía Nuclear (IAEA), cuyos inspectores eran los encargados de vigilar el cumplimiento del JCPOA, pactado en 2015.

Teherán precisó que si las sanciones establecidas por Estados Unidos son levantadas e Irán se beneficia, regresará a sus compromisos.

Irán estableció en mayo su plan de reducción de compromisos establecidos en el acuerdo internacional sobre su programa nuclear, firmado en 2015.

Esta fue la respuesta luego de que el gobierno de Donald Trump anunció la salida unilateral de este pacto en 2018. Tras eso, Washington restauró las sanciones contra Teherán.

En respuesta, y tras denunciar la falta de ayuda del resto de países firmantes para sortear el castigo económico impuesto por Estados Unidos, Irán decidió en julio iniciar la desconexión paulatina de los compromisos adoptados.

Por su parte, Alemania, Reino Unido y Francia pidieron a Irán que reanude plenamente sus compromisos adquiridos en el pacto nuclear firmado.

“Hacemos un llamado en particular a Irán para que se abstenga de cualquier acción violenta o de proliferación”, indicaron el presidente de Francia, Emmanuel Macron; la canciller alemana, Angela Merkel, y el primer ministro británico, Boris Johnson, en un pronunciamiento conjunto.

Además, Teherán amenazó con atacar Israel y reducir las ciudades de Tel Aviv y Haifa “a polvo” si Estados Unidos ataca los 52 sitios culturales que designó Donald Trump.

Tras días de conflicto, ayer el Parlamento de Irak aprobó una iniciativa que exige al gobierno poner fin a la presencia de tropas extranjeras.

El Parlamento solicitó al Ejecutivo en que “trabaje para acabar con la presencia de cualquier fuerza extranjera en el país”.

Tras ese anuncio, el presidente Donald Trump amenzó a Irak con sanciones si hay alguna hostilidad.

En tanto, la Secrataría de Relaciones Exteriores (SRE) mexicana expresó preocupación por los sucesos en la región.

“El gobierno de México sigue con preocupación los recientes sucesos en Irak e Irán. En apego a los principios constitucionales de política exterior, refrenda el valor del diálogo y la negociación en la solución de controversias internacionales”, manifestó la dependencia a través de su cuenta de Twitter.

Fuente: excelsior.