Una de las marcas más prolíficas en el mercado de las tabletas es Samsung, que en 2019 ha lanzado nuevos modelos y renovado un veterano de la firma coreana: la Samsung Galaxy Tab A de 10.1″, una enfocada al consumo multimedia en escenarios domésticos que llega tres años después del modelo original. Hemos probado a fondo la Samsung Galaxy Tab A 10.1 (2019) y estas son nuestras impresiones.

Especificaciones técnicas del Samsung Galaxy Tab A 10.1 (2019)

Tres años son más que suficientes para justificar una renovación, especialmente a nivel de hardware. La firma coreana no se ha complicado la vida actualizando lo básico para seguir ofreciendo un dispositivo enfocado al hogar: a nivel de componentes, un salto necesario en RAM, capacidad y procesador más moderno que doten al dispositivo de fluidez en tareas como la navegación o el visionado de contenido. Con el fin de potenciar este último punto, Samsung ha incorporado la tecnología Dolby Atmos para lograr un sonido más inmersivo.

SAMSUNG GALAXY TAB A 10.1 (2019)
PANTALLA LCD TFT de 10,1 pulgadas
RESOLUCIÓN 1920 x 1200 (WUXGA)
PROCESADOR Ocho núcleos hasta 1,8 GHz
RAM 2/3 GB RAM
MEMORIA 32/64 GB (ampliables vía microSD, hasta 512 GB)
VERSIÓN S.O. Android 9 Pie + Samsung One UI
CONECTIVIDAD WiFi ac 2.4G+5GHz, BT 5.0, LTE (opcional), jack 3,5 mm
CÁMARAS Trasera: 8 MP, f/2.0, AF. 1080p@30fps. Frontal: 5 MP f/2.2, 1080p@30fps
DIMENSIONES 245.2 x 149.4 x 7.5 mm
PESO 469 g (versión WiFi)
BATERÍA 6.150 mAh
OTROS WiFi ac 2.4G+5GHz, BT 5.0, LTE (opcional), jack 3.5 mm, Dolby Atmos

Tampoco hay grandes novedades en conectividad, donde el principal atractivo radica en la existencia de una versión con LTE para poder usar internet de forma independiente. En cuanto a óptica, tanto la cámara trasera como la selfie han ganado en megapíxeles. No son cámaras para grandes alardes fotográficos, pero sí que han ganado en cuanto a funcionalidad y opciones.

Pero no todos los saltos han sido hacia delante: su batería pasa de 7.300 mAh a 6.150 mAh. De nuestro análisis del modelo anterior destacábamos precisamente las nada desdeñables 10 horas de autonomía. Habrá que esperar a la prueba para descubrir si la autonomía se ha resentido o si, por el contrario, la mayor eficiencia de componentes y software ha posibilitado que este recorte no merme sensiblemente uno de los puntos fuertes de esta tableta.

La consecuencia directa de una batería inferior es la consecución de una tableta más compacta y ligera que gana en manejabilidad, con 50 gramos menos de peso y 7 milímetros más fina.

Diseño: Samsung viste de premium su gama de entrada

Delante

Mucho ha llovido desde aquella Tab A de 10.1″ 2016, algo que queda patente a simple vista: de aquellos gruesos marcos con botón central y acabados en plástico poco queda. En su lugar, unos bordes más estilizados y una carcasa unibody metálica de aluminio disponible en colores negro, oro y plata metalizados. Ni rastro de botones físicos en el frontal.

Y es que aunque esta tableta de 2019 sigue siendo un modelo de entrada — alejado de propuestas más ambiciosas de la marca como la Samsung Galaxy Tab S6 o, un escalón por debajo, Samsung Galaxy Tab S5e —, Samsung le ha conferido un aspecto cuidado y atractivo que no denota lo ajustado de su presupuesto. Como cara B, ese acabado metalizado mate tan atractivo y agradable en mano es un imán de huellas.

Nada hace pensar en el aspecto de la Samsung Galaxy Tab A 10.1 (2019) que se trate de un modelo de entrada

La renovación de 2019 es más estilizada, tanto en el grosor como en altura y anchura, logrando así un mejor aprovechamiento de sus dimensiones con un 80,7% de ratio entre pantalla y cuerpo. Ya hemos anticipado que los marcos son más finos, un adelgazamiento especialmente notable en los laterales, invitando a usarla en apaisado, una disposición típica para el visionado de vídeos.

Trasera

Esta diferencia entre marcos superiores e inferiores vs. laterales es común con el modelo previo, así como lo redondeado de sus bordes, un elemento de diseño que facilita su agarre.

No son las únicas similitudes, si bien la distribución de los botones y elementos distribuidos por los bordes son idénticos a su predecesora: en la derecha el botón de encendido y apagado, el control de volumen y la ranura microSD para tarjetas de hasta 512 GB. Todo despejado en el lado izquierdo. En la zona superior localizamos el pequeño orificio del micrófono y el jack de 3,5 mm y en la inferior, las rejillas de los dos altavoces y el puerto USB-C.

La Samsung Galaxy Tab A 10.1 (2019) está disponible en dos versiones: o con Wi-Fi + conexión LTE o únicamente con Wi-Fi, siendo esta última la que nosotros hemos probado.

Detalle

En el frontal, el panel de cristal LCD TFT es el prácticamente el único protagonista, con excepción de la cámara frontal de 5MP. En la trasera, completamente lisa pero con buen agarre, el logo de Samsung ocupa el centro. Un cambio respecto al modelo anterior es que la firma coreana ha desplazado la cámara principal desde la parte central hasta la esquina superior izquierda, en una pequeña franja más oscura (estamos probando el modelo negro).

En su conjunto, estamos ante una tableta cómoda en mano y muy ligeraque destaca por su buena construcción y manejabilidad. Y es que esos 10,1″ de diagonal con ratio 16:10 ofrecen un equilibrio muy funcional entre área de visualización y portabilidad.

De hecho, gracias a su diseño alargado, podremos agarrarla de lado a lado con una sola mano de forma firme cuando está en vertical. En nuestro caso, la tableta nos venía con la funda de Samsung, un accesorio muy interesante tanto para proteger el dispositivo como para usarla como pie para dejarla apoyada en posición horizontal.

Una pantalla todoterreno

Xtk

Uno de los elementos más determinantes en nuestra experiencia con una tableta es la pantalla. En esta Samsung Galaxy Tab A 10.1 (2019) encontramos un panel de 10,1 pulgadas con resolución Wide Ultra eXtended Graphics Array o WUXGA, entregándonos una densidad por pixel de 224 ppi en un panel con tecnología LCD IPS.

Este estándar WUXGA, más frecuente en dispositivos de visualización para aplicaciones informáticas que para dispositivos con vocación audiovisual, es consecuencia de la combinación del diseño alargado y el aprovechamiento de sus dimensiones a la hora de integrar la pantalla. Asi como esta tableta logra 120 líneas más de resolución que el Full HD para las mismas columnas.

Entre los puntos fuertes de su panel encontramos su nitidez, las opciones de brillo y la reproducción de color. Según el fabricante, este modelo es capaz de reproducir hasta 16 millones de tonalidades, si bien en nuestra experiencia destacamos lo correcto y natural de estos, aunque con cierta tendencia a la saturación y la calidez que provocan una sensación de impacto.

En cuanto al brillo, la Samsung Galaxy Tab A 10.1 (2019) proporciona una amplia horquilla de brillo, con la ventaja de incluir en sus Ajustes de pantalla un Modo exterior que incrementa el brillo para cuando nos encontramos expuestos a la alta luminosidad del sol, una función “inteligente” que se desactiva al cuarto de hora si es que ya no usamos la pantalla. Hemos probado la tableta en interiores y en exteriores, y si bien es con menor luminosidad cuando mejor se aprecian el contraste y el color, bajo la luz del sol también podremos disfrutar del visionado de vídeos y la lectura de texto sin dificultad.

También es destacable su sensibilidad táctil: durante nuestro análisis los toques han sido rápidos y precisos, sin accidentes o toques fantasmas, ni siquiera sujetando los marcos. En general, esta tableta proporciona una buena experiencia de uso, si bien el contraste podría ser mejor.