Las autoridades de República Democrática del Congo (RDC) han conrmado este martes que ha sido detectado un segundo caso de ébola en la ciudad de Goma, situada cerca de la frontera con Ruanda.

Giscard Kusema, miembro del equipo de prensa de la Presidencia congoleña, ha detallado que el
paciente es un minero que llegó a la ciudad desde Mongwalu, situada en la provincia de Ituri (noreste).
Asimismo, ha recalcado que “la población no está en peligro” y que “la situación está bajo control”.
“Todos los contactos han sido ya identicados”, ha agregado, según el portal local de noticias Actualité.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró el 18 de julio el brote como una emergencia de  salud pública internacional, un día después de que se detectara un primer caso en Goma, una ciudad de dos millones de habitantes.

El paciente era un pastor evangelista que llegó a la ciudad desde Butembo –una de las más afectadas por el brote– y que falleció posteriormente en un centro médico.

Según los últimos datos facilitados por el Ministerio de Sanidad de RDC, el brote declarado en agosto
de 2018 ha dejado hasta la fecha 2.592 casos –2.498 conrmados y 94 probables– y 1.743
fallecidos.
La OMS señaló la semana pasada que trabajará con las autoridades del país africano para usar un
segundo tipo de vacuna para hacer frente al brote de ébola.

El exministro de Sanidad Oly Ilunga se opuso a esta nueva vacuna, si bien dimitió el 22 de julio en
respuesta a la decisión del presidente, Félix Tshisekedi, de ocuparse personalmente de la situación.