La marca Petro-7 busca operar 520 gasolineras en los siguientes cuatro años.

Para lograrlo, desembolsará 6,000 millones de pesos (mdp) hacia 2023, de los cuales, 400 millones se destinarán a sistemas de recuperación de vapores para mitigar el impacto ambiental de las estaciones, detalló en entrevista su director general, Juan Carlos Paredes.

Esta meta se alinea con el aniversario número 100 de la compañía Iccon, propietaria de la marca, quien pretende consolidarla en 8 entidades: Nuevo León, Coahuila, Baja California, Chihuahua, Tamaulipas, Jalisco, Guanajuato y Estado de México.

Actualmente, la firma cuenta con 237 estaciones donde trabajan 2,800 empleados. “Vamos a cerrar  el año con 280 estaciones de servicio”, comentó el directivo.

La empresa ha construido entre el 30 y 40% de sus estaciones, mientras que el resto son unidades reconvertidas. Tras el cambio de imagen, el incremento en sus volúmenes de venta comienzan desde  9 hasta 40%.

“Las estaciones de servicios quedan operadas por nosotros y la calidad de producto siempre lo hemos mantenido”, comentó.

La reforma energética abrió la posibilidad a nuevos jugadores de abanderar  12,000 estaciones de servicio en el territorio mexicano. Pemex ha perdido casi 30% de participación de mercado ante nuevos jugadores, aunque conserva el 90% del suministro de combustible.

Analizan importación

Paredes dijo que hay varios jugadores del sector midstream que invierten en terminales de almacenamiento y ductos para traer la molécula, en gestionar las importaciones y dijo que están analizando su incursión en esta parte de la cadena de valor.

“Estamos mirando, se desarrolla en paralelo, pero el enfoque fundamental de nosotros es el cliente final. si necesitamos para poder satisfacer las necesidades de ese cliente y garantizar un abasto continuo y buscar otras alternativas lo vamos a ver”

Con el suministro al 100% por parte de Pemex, Petro-7 identificó su capacidad de reacción ante el desabasto y compras de pánico que experimentó durante el primer trimestre de 2019, pues desarrollaron una aplicación móvil para identificar las estaciones con combustible, así como proveedores alternos.

“Aprendimos a gestionar el poco combustible para hacerlo ‘rendir’”, agregó.