Reuters.- El Fondo Monetario Internacional (FMI) aplicó este martes un fuerte recorte a las estimaciones de crecimiento económico de América Latina, ante una desaceleración más acentuada prevista en Brasil y México, exacerbada por disputas comerciales globales y un deterioro en la confianza de inversores y analistas.

En su informe Perspectivas de la Economía Mundial, el FMI apuntó a un enfriamiento del PIB en México, que actualmente espera concretar un nuevo tratado comercial con Estados Unidos y Canadá, el T-MEC. La segunda mayor economía regional crecería 0.9% este año y repuntaría a 1.9% en 2020, con una reducción de 0.7 puntos porcentuales en la estimación de 2019.

El organismo indicó que prevé que la región en su conjunto se expanda a un ritmo de 0.6% este año, un recorte de 0.8 puntos porcentuales en relación a su último cálculo de abril. Para el 2020, la previsión también fue ajustada ligeramente a la baja, a 2.3%.

“En América Latina, la actividad se desaceleró notablemente al comienzo del año en varias economías, debido principalmente a factores idiosincrásicos”, indicó el organismo, que hizo un llamado a los gobiernos a regular el gasto fiscal y el endeudamiento.

Las disputas arancelarias y por acuerdos comerciales, junto con un incremento de la deuda y la imposibilidad de sacar adelante reformas macroeconómicas importantes han dañado las perspectivas de Brasil y México, las principales economías latinoamericanas, detalló el FMI.

En Brasil, donde la moral se está evaporando tras rebajas en la calificación de crédito y dudas sobre la viabilidad de la reforma previsional, la economía se expandiría 0.8% este año, una disminución de 1.3 puntos porcentuales frente a la última estimación de abril. Para 2020, la actividad mejoraría a 2.4%.

Latinoamérica ha experimentado una ralentización económica en los últimos años y en 2018 creció apenas 1%, según el FMI, lastrada por factores geopolíticos, un descenso de la inversión, datos más moderados en China, y últimamente, por un intrincado panorama comercial.

Crecimiento global, a la baja

En su reporte, el Fondo redujo en 0.1 puntos porcentuales sus proyecciones de crecimiento mundial para este año y el próximo, a 3.2% y 3.5%, respectivamente, con riesgos en los pronósticos inclinados mayormente a la baja.

La economía global estará afectada por una inflación más moderada y la guerra arancelaria entre Estados Unidos y China que amenaza las cadenas globales de suministros, mencionó el FMI.

Los riesgos del panorama se inclinan a la baja, añadió, en vista de las nuevas tensiones comerciales, las cuales podrían frenar al sector tecnológico, afectar la confianza y perjudicar la inversión.

El FMI destacó además que la economía argentina se contrajo en el primer trimestre, pero a un ritmo más lento que en 2018, por lo que disminuyó ligeramente su previsión para este año en el país sudamericano.

Asimismo, el reporte llamó la atención sobre la crisis humanitaria y el “efecto devastador” de la crisis de Venezuela, donde la economía se contraería alrededor de 35% este año.

 

 

 

 

 

Fuente: Forbes.