El líder opositor venezolano, Juan Guaidó, afirmó ayer que el presidente Nicolás Maduro actúa “cobardemente” al retener a uno de sus tíos, cuyo paradero se desconoce desde que ambos llegaron al aeropuerto internacional de Caracas.

Juan José Márquez, quien acompañaba a Guaidó el martes en su regreso a Venezuela tras una gira internacional iniciada el 19 de enero, pasó “con normalidad migración, y estando a punto de salir (…) fue retenido para una supuesta revisión del Seniat”, el órgano tributario del país, dijo la oficina de prensa de Guaidó en Twitter.

Retiene a un miembro de mi familia (…) la cobarde dictadura”, indicó Guaidó a reporteros al llegar a una plaza del este de Caracas donde comenzaba a sesionar la Asamblea Nacional, dominada por la oposición.

Como Maduro “es un cobarde (…) que no da la cara, que no se atreve a pisar una plaza pública sin seguridad (…) arremete contra la familia”, agregó.

Romina Botaro, esposa de Márquez y quien llegó con Guaidó a la plaza, dijo que su marido no tiene nada que ver con la política y que es piloto de aviones.

Como cualquier tío protector, quiso acompañar el retorno de su sobrino al país”, agregó Botaro. “No sabemos del paradero de mi esposo” desde que salió de migración.

En medio de un tumulto, empujones y golpes de simpatizantes del oficialismo, Guaidó salió del aeropuerto entre decenas de periodistas, fotógrafos y diputados opositores, también agredidos.

ADVIERTE SANCIONES

Guaidó defendió ayer las sanciones que, según él, preparan sus aliados para presionar la salida de Maduro.

Luego de una sesión parlamentaria en una plaza de Caracas, Guaidó dijo que estas medidas son “las herramientas del mundo libre para enfrentar regímenes (…) violadores de derechos humanos, torturadores y asesinos”.

A su juicio, en el caso venezolano las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea contra el gobierno han sido un mecanismo “efectivo” de presión.

Sí, van a venir nuevas sanciones a criminales y a todos los que respaldan a la dictadura”, reiteró el opositor.

En su gira internacional, Guaidó se reunió con el presidente de EU, Donald Trump.

El mandatario estadunidense le prometió aplastar a la “tiranía” de Maduro, al que intenta expulsar con medidas como una prohibición para negociar petróleo venezolano en EU y un bloqueo financiero.

Ayer, Maduro volvió a culpar al opositor de alentar las sanciones que en su criterio sólo han servido para agravar la crisis socioeconómica. Según la ONU, la situación ha obligado a marcharse del país a 4.8 millones de personas desde finales de 2015.

Los “traidores y vendepatria salen al exterior a pedir sanciones contra el pueblo”, denunció Maduro ante partidarios que marcharon hasta el palacio presidencial de Miraflores para celebrar el Día de la Juventud.

Fuente: excelsior.