Las Naciones Unidas (ONU) condenó hoy de manera enérgica el atentado contra un campamento militar en el noreste de Mali, que dejó 53 soldados y un civil muertos, y del cual se responsabilizó la organización yihadista Estado Islámico (EI).

En estas dolorosas circunstancias, y en nombre de la familia de las Naciones Unidas, deseo expresar mi total solidaridad con el gobierno y el pueblo de Mali, así como mi aliento a las fuerzas de defensa y seguridad”, señaló el jefe de la Misión de las Naciones Unidas en Mali (MINUSMA), Mahamat Saleh Annadif.

En un comunicado publicado en ONU Noticias, la MINUSMA ratificó su determinación de trabajar “de acuerdo con su mandato, junto con las autoridades y el pueblo malienses, así como con los socios internacionales”, para un retorno permanente de la paz al país africano.

Por su parte, el Estado Islámico se responsabilizó este sábado del atentado que se registró en el cuartel de las Fuerzas Armadas Malienses (FAMA) en Indelimane, en el noreste de Mali, cerca de la frontera con Níger.

De acuerdo con las autoridades, los agresores llegaron a bordo de motos y camionetas y comenzaron a disparar contra el cuartel militar con lanzagranadas, RPG7 y fusiles Kalashnikov.

De acuerdo con el ministro maliense de Comunicación, Yahya Sangaré, cuando los refuerzos del ejército llegaron al lugar solo encontraron 10 sobrevivientes, mientras que los agresores huyeron llevando consigo vehículos, armas y municiones.

Sangaré indicó que la situación ya se encuentra bajo control, mientras continúa la identificación de los cuerpos.

El ataque se produce un mes después del doble atentado a los campamentos de las FAMA en Mondoro y Boulikessy, en la frontera con Burkina Faso, en los que murieron 41 personas.

Con el apoyo de las fuerzas de mantenimiento de paz de la ONU, las Fuerzas Armadas malienses llevan a cabo en la región operaciones de seguridad en el marco de la lucha antiterrorista contra grupos yihadistas.

Mali se ha convertido en el foco más activo del yihadismo en la región del Sahel y aunque no tiene el nivel de inestabilidad que Libia, sus autoridades no han conseguido imponer el control sobre el territorio, ni evitar que cada semana los grupos terroristas ataquen de una u otra forma.

Fuente: Excelsior.