Vaya lío que se ha desatado con este tema del cuadro de la “Doña” María Félix

Y es que resulta que con la detención del   ex gobernador de Chihuahua César Duarte acusado de peculado y aprehendido en Estados Unidos, salió a la luz tremenda noticia, que involucra a María Félix, Juan Gabriel y DUarte

Bueno, en este asunto hasta los herederos del Divo de Juárez están envueltos. Ya que se supone que un cuadro que tenía el ex gobernador en su era propiedad de Juan Gabriel y ahora que está detenido éstos lo reclaman.

Así se lee en Milenio Diario, donde nos enteramos que su abogado interpondrá una denuncia ante la Fiscalía General de la República para que devuelva el retrato de María Félix pintado en 1949 por Diego Rivera, y que le fue regalado por la propia actriz a Alberto Aguilera, nombre real del artista.

Guillermo Pous, albacea de la sucesión y abogado del heredero universal del hijo mayor de Juan Gabriel, Iván Gabriel Aguilera Salas, en entrevista con M2 asegura que “ese cuadro don Alberto no se lo regaló a César Duarte, se lo dio en resguardo para que lo cuidara, porque su casa de San Miguel de Allende estaba deshabitada y no podía tener una pieza de tal valor en su residencia sin que nadie pudiera cuidarla adecuadamente”.

El precio de la obra en cuestión podría oscilar entre los 6 y los 7 millones de dólares, aunque no existe un avalúo formal, reconoce el abogado.

“Este cuadro de María Félix se lo regaló la actriz a don Alberto por la amistad que había entre ellos. Esa obra la tuvo exhibida en sus diferentes casas en Malibú, en Las Vegas y por último en San Miguel de Allende, de donde fue extraída”. 

Tras fallecer el cantante, el 28 de agosto de 2016, y al hacer todo el inventario, Pous se percató que ya la obra de arte ya no estaba: “Al realizar las investigaciones correspondientes averigüé que esta pintura había sido entregada a César Duarte”.

Refiere el abogado que le hizo un requerimiento formal al ex gobernador, pero a modo de invitación personal por la estrecha relación que tuvo con Juan Gabriel. “Se organizó una cena con él, donde efectivamente reconoció que tenía el cuadro y amablemente aceptó devolverlo. Después (vino) esta serie de asuntos que tuvo que estar atendiendo, de índole penal, (y) ya no volvimos a tener contacto”. 

Pous afirma que tiene las pruebas para que se pueda integrar la tarjeta de investigación con el fin de que la obra “robada” sea devuelta, y que están abiertos para llegar a una negociación.

“La única forma que tenemos de recuperar la pintura por la vía legal es presentando una denuncia por robo, porque para nosotros eso es lo que sucedió: fue un robo, a menos que el ex gobernador demuestre que no lo fue, que se trató una donación o una compraventa. En este caso, tendría que exhibir esa documentación que acreditara la absoluta propiedad de la pieza artística. De lo contrario, tendrá que ser restituida a favor del propietario, en este caso la sucesión”.

 Destaca que hace cuatro años interpusieron una denuncia por robo en la entonces Procuraduría de San Miguel Allende (Guanajuato), donde Juan Gabriel tenía una casa de descanso, a la que trasladó el retrato hacia el 2008, después de haberlo tenido en sus casas de Ciudad Juárez (Chihuahua), Malibú (California) y Las Vegas (Nevada).

“Don Alberto no se la regaló a César Duarte ni se la dio para pagar un adeudo fiscal, como se rumora. Se la dio en resguardo, pensamos que a finales de 2015 o principios de 2016, por la estrecha amistad que tenían y porque la casa de San Miguel es un rancho que está muy apartado, la seguridad era nula, sólo estaba el personal de servicio y mantenimiento; no era el mejor lugar para dejar una pieza tan cara. Pero ahí iba a terminar temporadas de conciertos y se quedaba a descansar”, narra.

El también abogado de Iván Aguilera, hijo y heredero universal del autor de Querida, detalla que cuando hizo el inventario de la casa de San Miguel Allende se dio cuenta que la obra no estaba.

“Empezamos a recabar pruebas y a obtener documentos, y todo nos llevó al exgobernador. Se tuvo una reunión con él en persona, en la que reconoció de forma expresa que él tenía ese cuadro y que su intención era devolverlo; después ya no hubo oportunidad de hablar con él, porque salió del país y dejó el cargo.

El Retrato de María Félix (1949) fue producto tanto de la fascinación de Diego Rivera por la cultura popular, en especial por el cine, como del amor que el muralista sentía por la actriz sonorense, mejor conocida como La Doña (1914-2002).

Juan Coronel Rivera, nieto del pintor y estudioso de su obra, quien no quiso opinar sobre el retrato perdido, revaloró “los extraordinarios” óleos que su abuelo confeccionó para las actrices María Félix y Dolores del Río.

Con información de Milenio Diario y El Diario.mx