Los avances tecnológicos nos han permitido ver asombrosos robots con los que se busca desde ampliar las capacidades de los seres humanos, hasta otorgarles funciones que permitan que las personas se centren en otras actividades. Pero hoy nos encontramos con algo nunca antes visto: un robot que se controla con el ano, literalmente.

Dani Ploeger, un artista holandés que se autodescribe como “especialista en nuevos medios y performance” recientemente presentó su nueva creación: ‘B-hind’, un robot que basa su operación en una sonda anal que recibe estimulas por medio de esfínter de su creador.

Para qué controlar un robot con la mente si lo puedes controlar con el ano

De acuerdo a la descripción del mismo Ploeger:

‘”B-hind’ es una solución única de Internet de las cosas (IoT) para integrar completamente el músculo de su esfínter en la vida cotidiana. El revolucionario sistema de interfaz alimentado por electrodos anales reemplaza la interacción convencional de la mano y el dispositivo basado en la voz y permite un control digital avanzado arraigado en el interior de tu cuerpo.

Es decir, según Ploeger, usar el músculo del esfínter es una opción viable para aquellos que deseen sustituir las interfaces de usuarios donde se usan las manos o la voz, dando así un nuevo valor a un nuevo músculo en estas tareas, como las de poder controlar un robot.

Según explica su creador, ‘B-hind’ se inspira en un extraño performance de 1994 llamado “Amplified Body” de Stelarc, que planteaba la idea de que los cuerpos humanos son obsoletos, y los robots usaban para equipo médico industrial para crear objetos dignos de una pesadilla cyberpunk. Lo curioso de esta instalación de arte, es que en ningún caso se habla de robots controlados con el ano.

Como mencionaba, ‘B-hind’ se basa en el uso de una sonda anal, la cual es usada comúnmente para estimular los músculos del esfínter anal y reforzar los músculos del suelo pélvico. Ploeger modificó esta sonda para que fuera capaz de detectar las contracciones del esfínter para posteriormente traducirlas en comandos para controlar un pequeño robot.