Comunidades indígenas de Calakmul, Campeche, obtuvieron del Poder Judicial de la Federación una suspensión provisional para la ejecución del proyecto Tren Maya, en respuesta a una solicitud de amparo que presentaron en contra del proceso de “consulta simulada” realizada por el Gobierno de México.

De acuerdo con el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (Cemda), en la solicitud de protección de la justicia que fue presentada el 6 de enero de 2020, el pueblo Maya Peninsular y Ch´ol, asentados en Xpujil, reclamó “la simulada y fraudulenta consulta indígena ordenada por el Ejecutivo Federal y ejecutada en perjuicio de los pueblos indígenas de Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Tabasco y Chiapas”.

Los también integrantes del Consejo Regional Indígena y Popular de Xpujil (CRIPX) denunciaron además la “ilegal consulta y aprobación del proyecto denominado Tren Maya, cuya acción se realizó en flagrante violación a nuestro derecho humano a que se garantice una consulta previa, libre, informada, de buena fe y que sea culturalmente adecuada”.

En el amparo que presentamos denunciamos que el proceso de consulta se llevó a cabo sin cumplir con los estándares internacionales que marca el Convenio 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales en Países Independientes, de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), del cual el Estado mexicano es parte, así como en contravención de lo que señala la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH)”, manifestaron.

Los inconformes explicaron que la consulta no cumplió con el carácter de informada ni previa, “pues no recibimos información detallada con antelación suficiente, ni se respetó nuestro derecho a la participación toda vez que la estructura de los foros de la supuesta fase informativa, de fecha 30 de noviembre de 2019, fue diseñada e implementada de manera unilateral, por lo que sus formas y modos no fueron acordes con las formas de deliberación y toma de acuerdos de las comunidades”.

Fuente: excelsior.