El ambiente de inversiones para la industria petrolera y de gas es negativo para 2020 en México ya que Petróleos Mexicanos (Pemex) tiene una capacidad limitada para aumentar las inversiones y cumplir con los objetivos de producción y reservas, señaló este viernes la agencia calificadora Moody’s.

El cambio hacia la exploración y producción favorece la calidad crediticia de la industria en Brasil, mientras que la producción en 2020 parece, como mucho, estable en México a medida que cesan las inversiones.

José Luis Ortega, director de deuda y multiactivos de BlackRock mencionó que esperaran una revisión en la calificación crediticia del soberano por parte de Moody’s que pudiera tener ajustes ‘ligeros’ sobre la petrolera.

“En el caso de Pemex se ha dado la vuelta en la parte de la producción, empezamos a ver una mejora en esta parte, y el acceso a los mercados financieros de nuevo (con la colocación del próximo martes) es una buena señal, pero no descartamos que pudiéramos ver algún ajuste en su calificación también, justamente porque la deuda que tiene, si bien ha mejorado sus condiciones, sigue siendo muy alta”, dijo Ortega.

“Las condiciones de negocio variarán en 2020, lo que contribuirá a condiciones generales estables”, afirmó por otra parte Nymia Almeida, vicepresidenta senior de Moody’s.

La agencia agrega que si bien las inquietudes geopolíticas y económicas y las tensiones comerciales opacarán a los mercados de metales a nivel global en 2020, la mejora de las estructuras de capital ha dado lugar a menor apalancamiento y menor riesgo de liquidez para los productores latinoamericanos.

Las consideraciones ambientales y sociales serán más relevantes para el sector minero de la región, con crecientes demandas de transparencia y mejora dentro de la industria de metales y minería.

“Muchas compañías mineras de la región han mejorado las bases de costos y reducido la deuda desde 2015, dejándolas mejor preparadas para una recesión del mercado, aunque una mayor disminución de los precios aumentaría los riesgos”, afirmó Bárbara Mattos, vicepresidenta senior de Moody’s.

Fuente: el financiero.