El gobierno de Estados Unidos cuestionó que Petróleos Mexicanos (Pemex) quiera quitar un yacimiento en el Golfo de México.

Específicamente el Departamento de Estado estadounidense consideró perturbadora la posibilidad de que Pemex quite el control operativo del campo petrolero Zama a un consorcio privado liderado por la estadounidense Talos Energy.

Kurt Donnelly, subsecretario de Estado Adjunto para Diplomacia Energética, también consideró que es un acontecimiento perturbador, aun cuando “México parecía estar en el camino correcto y esto pareciera indicar que está desviándose”.

Continuó: “Vemos esto como un hecho potencialmente problemático y lo hemos planteado ante México”.

De acuerdo con publicación del diario Reforma, ex funcionarios de Pemex y fuentes de la industria confirmaron que Pemex busca convertirse en el operador del campo Zama que, según el consorcio privado, podría contener hasta 800 millones de barriles de petróleo.