Hubo un tiempo no muy lejano en que Yahoo! era la empresa que parecía poder con todo y con todos. A finales del siglo pasado no había quien le tosiese, pero a pesar de tener un futuro fantástico ante sí, Yahoo! ha quedado relegada a una sombra de lo que fue.

La culpa, ojo, es solo de Yahoo!. La empresa no paró de cometer errores garrafales en decisiones críticas que la hubieran convertido en un gigante tecnológico quizás mayor que cualquiera de los que existen hoy en día. Pero una y otra vez, planteada la opción, en Yahoo! siempre eligieron la opción incorrecta. He aquí los grandes errores de una empresa que pudo haber sido mucho más de lo que es.

Una empresa que lo fue todo a finales de los 90

En 1996 Yahoo!, que había creado uno de los primeros directorios de internet -precursor de los buscadores- se convirtió en una empresa pública.

La empresa comenzó a crear servicios pa

Cap 004Jerry Yang y David Filo, los fundadores de Yahoo!

ralelos (Mail, Messenger, Grupos, Respuestas) y su valor creció de forma asombrosa en los cuatro años siguientes, y de aquel valor de mercado inicial en bolsa de 848 millones de dólares pasó a valer 125.000 millones en el año 2000.

Tenía tanto dinero que se convirtió en protagonista de la burbuja de las puntocom. En 1999 compró Geocities por 3.600 millones de dólares(cerrarían puertas 10 años después sin haber logrado nada) y Broadcast.com (¿alguien se acuerda de ella?) por la friolera de 5.700 millones de dólares. Una de las peores adquisiciones de la historia.

Decisiones como aquellas no fueron las más adecuadas, pero es que lo peor estaba por llegar, porque tras la explosión de la burbuja comenzaron a producirse aquellos errores garrafales de Yahoo!. Veamos los cinco más destacables.

No comprar Google por 1.000 millones de dólares

Larry Page y Sergey Brin apenas habían iniciado a poner en marcha su buscador cuando en 1998 ofrecieron a AltaVista comprarlo por tan solo 1 millón de dólares.

Yahoo2

Querían seguir estudiando, pero en AltaVista no estaban interesados. Tampoco en Yahoo!, donde querían no que la gente encontrar lo que buscaba y se fuera a otros sitios web (que es lo que hacía el buscador de Google hasta no hace mucho), sino que se quedaran en su plataforma.

Yahoo! acabó comenzando a usar el buscador de Google en su propia plataforma y decidió que lo mejor sería comprar a Google. Terry Semel, el entonces CEO de Yahoo!, estuvo negociando durante meses, y se indignó cuando Brin y Page rechazaron la oferta de compra de 3.000 millones de dólares. Ellos pedían 5.000 millones, una oferta que consideraban mucho más razonable.

Semel se negó rotundamente. Yahoo! compró Inktomi, un motor de búsqueda, por 257 millones de dólares, creyendo que eso bastaría para poner sus búsquedas en el lugar que se merecían. También compraron Overture, competidor de AdWords, en 2003, pero tardaron mucho en ponerlo en marcha y dejaron que Google licenciara una patente clave de esa plataforma que les permitiría dominar el mercado a la larga. Creyeron que con eso bastaba.

Se equivocaron.

No ofrecer más por Facebook

Algo similar ocurrió en 2006 cuando vieron acertadamente el potencial de Facebook (otros ya lo habían visto también e intentaron adquirir la empresa de Zuckerberg) y trataron de comprarla por 1.000 millones de dólares según el libro ‘The Facebook Effect’, de David Kirkpatrick.

Cap 005

No era mala oferta, sobre todo considerando que Facebook tenía dos años de vida, unos 9 millones de usuarios y 20 millones de dólares en ingresos. Los inversores de Facebook pensaban que había que aceptar la oferta, pero Zuckerberg dejó claro en una reunión con el equipo que no iban a vender.