No fue confusión; nos utilizaron para enviar un mensaje, afirmó Adrián LeBarón, abuelo de víctimas de la masacre ocurrida en los límites de Sonora y Chihuahua el pasado lunes que dejó un saldo de nueve muertos y seis lesionados.

Criticó que las autoridades consideren que lo ocurrido con su familia fue una confusión de un grupo del crimen organizado, al afirmar que sus seres familiares fueron utilizados para enviar un mensaje.

Y es que aseguró que hay testimonios de los menores sobrevivientes que viajaban atrás de la primera unidad baleada, quienes describen cómo la primera mujer agredida descendió del vehículo levantando las manos, y aun así fue acribillada.

“No fue un ataque hacia nosotros, pero no hay confusión, a alguien le están queriendo lanzar un mensaje y utilizaron a nuestra familia”, reiteró previo a los funerales que se realizaron este jueves en La Morita.